PAN DE LECHE JAPONÉS 
| Cuando hablamos de panes suaves, esponjosos y que se deshacen en la boca, el Pan de Leche Japonés, también conocido como Hokkaido Milk Bread, se lleva todos los aplausos . Su textura es tan suave como una nube
, su sabor delicado conquista a cualquiera y su apariencia doradita lo convierte en una joya de la panadería casera
.
La magia detrás de este pan está en el famoso tangzhong, una técnica asiática que consiste en cocinar una mezcla de harina, leche y agua para crear un roux espeso que le da humedad y ternura al pan, haciéndolo durar fresco por más tiempo. Así que si buscas un pan casero que no solo sea delicioso, sino también espectacularmente suave y duradero, ¡esta receta es para ti!
Ingredientes
Para el Tangzhong (roux):
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3 cucharadas de harina de trigo (30 g)
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½ taza de leche (120 ml)
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½ taza de agua (120 ml)
Para la masa:
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2½ tazas de harina de trigo de fuerza (320 g)
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¼ taza de azúcar (50 g)
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2 cucharaditas de levadura seca instantánea (6 g)
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½ cucharadita de sal (3 g)
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1 huevo grande
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½ taza de leche entera tibia (120 ml)
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Todo el tangzhong
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¼ taza de mantequilla sin sal a temperatura ambiente (60 g)
Para dar brillo (opcional):
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1 huevo batido (para barnizar antes del horneado)
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Mantequilla derretida (para pincelar después del horneado)
Paso a paso
1. Prepara el Tangzhong
Este es el secreto del pan suave. En una cacerola pequeña, mezcla la harina, la leche y el agua. Cocina a fuego medio-bajo, revolviendo sin parar hasta que se forme una pasta espesa y suave, parecida a un puré. Retira del fuego y deja enfriar completamente antes de usar.
Consejo: No dejes que hierva. Debe espesarse lentamente hasta que al pasar una espátula se vea el fondo.
2. Prepara la masa
En un bol grande (o batidora con gancho), mezcla los ingredientes secos: harina, azúcar, sal y levadura. Añade el huevo, la leche tibia y el tangzhong enfriado.
Mezcla bien hasta integrar. Luego añade la mantequilla poco a poco, y amasa hasta que esté completamente incorporada. Debes amasar entre 10 y 15 minutos, hasta que la masa esté suave, elástica y apenas pegajosa.
Prueba del gluten: Estira un poco de masa entre tus dedos. Si forma una capa fina sin romperse, está lista.
3. Primer levado
Forma una bola con la masa y colócala en un bol ligeramente engrasado. Cubre con un paño o film y deja que repose en un lugar cálido durante 1 a 1.5 horas, o hasta que duplique su tamaño.
Truco: Si hace frío, puedes colocar el bol dentro del horno apagado, con solo la luz encendida.
4. Forma los bollos
Desgasifica la masa suavemente (saca el aire) y divídela en 8 a 9 porciones iguales. Forma bolitas bien lisas y colócalas juntas en un molde rectangular, previamente engrasado o forrado con papel manteca.
Forma prolija: Puedes estirarlas y enrollarlas como mini panecillos para que queden con forma más estructurada.
5. Segundo levado
Cubre nuevamente y deja reposar 45 a 60 minutos, hasta que las bolitas casi doblen su tamaño. Este segundo levado da esa textura aireada y una miga impecable.
6. Horneado
Precalienta el horno a 180°C (350°F). Barniza los bollos con huevo batido para un acabado dorado y brillante. Hornea de 25 a 30 minutos, hasta que estén dorados por encima y firmes al tacto.
Consejo visual: Si se doran muy rápido, cubre con papel aluminio los últimos 10 minutos.
7. Final brillante
Al sacar del horno, puedes pincelar con mantequilla derretida para darles un brillo extra y más sabor . Deja enfriar unos minutos… ¡y prepárate para disfrutar el pan más suave que hayas hecho en casa!
Disfrútalo así:
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Con mantequilla y mermelada al desayuno
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Como pan para mini sándwiches
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Calientito, recién horneado, con un cafecito
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O solo… porque no necesita más para ser perfecto
Tips extra:
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Puedes rellenarlo con chocolate, crema pastelera o dulce de leche antes del segundo levado.
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Guarda el pan en una bolsa hermética una vez frío. Se mantiene suave por varios días.
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Si lo recalientas unos segundos en el microondas, ¡recupera su textura original!
¡Amasar nunca fue tan gratificante!
Este Pan de Leche Japonés no solo es hermoso y delicioso, también es una de esas recetas que enamoran desde el primer intento. Ya sea para consentirte o para compartir, vas a querer repetirlo cada semana.
Déjame saber si lo haces, ¡y califícalo del 1 al 10! ¿Listo para hornear felicidad?