Flan de Leche Condensada: El Postre que Conquista Corazones

Cuando pensamos en postres que nos llevan a la infancia, el flan siempre ocupa un lugar especial.

Su textura suave y cremosa, junto con ese toque dulce inconfundible, lo convierten en el rey de las sobremesas en muchas mesas. En esta ocasión, te traigo una versión aún más irresistible: el Flan de Leche Condensada. Un postre sencillo de preparar, pero que enamora desde el primer bocado. Si buscas impresionar a tus invitados o simplemente darte un gusto, esta receta es la elección perfecta.

Ingredientes:


Para el flan:

  • 1 lata de leche condensada (aproximadamente 400 g)
  • 1 lata de leche evaporada (aproximadamente 400 g)
  • 4 huevos grandes
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 1 taza de azúcar (para el caramelo)

Preparación:

1. Preparar el caramelo:

El primer paso para crear este delicioso flan es hacer un caramelo que servirá como base. Coloca la taza de azúcar en una cacerola pequeña a fuego medio y deja que se derrita lentamente. No remuevas el azúcar al principio, solo mueve la cacerola suavemente para que se derrita de manera uniforme.

Una vez que el azúcar haya adquirido un color dorado oscuro y una textura líquida, retírala del fuego con mucho cuidado. Vierte el caramelo en un molde para flan, asegurándote de cubrir bien el fondo y los lados con una capa delgada y uniforme. Deja que se enfríe y endurezca mientras preparas la mezcla del flan.

2. Preparar la mezcla del flan:

En un bol grande, bate los huevos ligeramente con un batidor de mano. Agrega la leche condensada y la leche evaporada, y mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. Para darle un toque de sabor extra, añade la esencia de vainilla.

Una vez que la mezcla esté lista y bien homogénea, vierte el contenido sobre el caramelo endurecido en el molde. Si es necesario, puedes pasar la mezcla por un colador para asegurarte de que no haya grumos o burbujas.

3. Cocción al baño maría:

El flan de leche condensada requiere un método de cocción suave para lograr su textura perfecta. Coloca el molde con la mezcla en una bandeja más grande que puedas llenar con agua caliente hasta la mitad. Este baño maría ayudará a que el flan se cocine de manera uniforme sin quemarse.

Precalienta el horno a 180°C (350°F) y hornea el flan durante unos 50-60 minutos. Para verificar si está listo, introduce un palillo en el centro; si sale limpio, significa que el flan está perfectamente cocido. Si aún está muy líquido, deja que se hornee unos minutos más, vigilando que no se dore en exceso.

4. Enfriar y desmoldar:

Una vez cocido, retira el molde del horno y déjalo enfriar a temperatura ambiente. Luego, refrigéralo por al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que el flan tome una consistencia firme y los sabores se intensifiquen.

Cuando llegue el momento de servir, pasa un cuchillo fino alrededor del borde del molde para despegar el flan. Coloca un plato grande encima del molde y, con un movimiento firme, voltea el flan para que el caramelo caiga suavemente sobre él, creando un glaseado irresistible.

5. Disfrutar:

Este Flan de Leche Condensada es perfecto para cualquier ocasión. Su textura cremosa y el toque dulce del caramelo harán que todos pidan una segunda porción. Puedes servirlo solo o acompañarlo con un poco de crema batida o frutas frescas para darle un toque extra de sabor y color.

Conclusión: El Flan de Leche Condensada es uno de esos postres que nunca pasan de moda. Con ingredientes sencillos y un proceso fácil de seguir, podrás preparar una delicia que encantará a todos tus comensales. Este postre es perfecto para cualquier ocasión, ya sea una cena especial o un antojo dulce de última hora. ¡Atrévete a probarlo y déjate conquistar por su suavidad y sabor inigualable!