Flan de Cajeta: Un Postre Tradicional con un Toque Dulce y Único

Si eres amante de los postres clásicos con un giro especial, el flan de cajeta es la receta perfecta para ti. Este postre, que combina la suavidad y textura cremosa del flan tradicional con el sabor dulce y caramelizado de la cajeta, es una verdadera joya de la repostería. Prepararlo en casa es más fácil de lo que parece y el resultado es simplemente espectacular. Ya sea para una comida familiar o una ocasión especial, este flan se convertirá en el protagonista indiscutible de la mesa.

Ingredientes:

Para crear este delicioso flan de cajeta, necesitarás los siguientes ingredientes:

• 1 taza de cajeta (dulce de leche de cabra)
• 1 lata de leche condensada
• 1 lata de leche evaporada
• 5 huevos
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 1/2 taza de azúcar
• 1/4 de taza de agua

Preparación:

Paso 1: Caramelizar el molde

Comienza preparando el caramelo. En una cacerola pequeña, agrega el azúcar y el agua, y calienta a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva y tome un color dorado claro. Asegúrate de no revolver demasiado para evitar que el caramelo se cristalice. Una vez que esté listo, vierte el caramelo en el fondo de un molde para flan o budinera, moviéndolo para cubrir completamente el fondo. Deja que se enfríe y endurezca mientras preparas la mezcla del flan.

Paso 2: La mezcla del flan

En la licuadora, mezcla la leche condensada, la leche evaporada, los huevos y la esencia de vainilla. Licúa hasta que todos los ingredientes estén bien integrados y la mezcla sea suave. Una vez lista, agrega la cajeta y licúa nuevamente hasta que se mezcle por completo.

Paso 3: Verter la mezcla en el molde

Vierte cuidadosamente la mezcla de flan sobre el caramelo endurecido en el molde. Asegúrate de que quede nivelado para que se cocine de manera uniforme.

Paso 4: Cocinar al baño María

Precalienta el horno a 180°C (350°F). Coloca el molde con la mezcla de flan dentro de una bandeja más grande y agrega agua caliente hasta la mitad de la altura del molde, creando así un baño María. Hornea durante aproximadamente 1 hora o hasta que al insertar un cuchillo en el centro, salga limpio.

Paso 5: Enfriar y desmoldar

Una vez que el flan esté cocido, retíralo del horno y deja que se enfríe a temperatura ambiente. Después, refrigéralo durante al menos 4 horas, o idealmente toda la noche, para que tome firmeza y los sabores se integren a la perfección.

Cuando esté bien frío, pasa un cuchillo por los bordes del molde para despegar el flan y voltéalo con cuidado sobre un plato grande. El caramelo derretido caerá por los lados, cubriendo el flan con una irresistible capa brillante.

Paso 6: ¡A disfrutar!

Sirve este espectacular flan de cajeta frío y observa cómo cada cucharada se derrite en la boca, liberando el sabor suave y cremoso combinado con el toque dulce y caramelizado de la cajeta.

Consejos adicionales:

• Para un extra de sabor, puedes agregar un toque de licor como ron o brandy a la mezcla del flan antes de hornearlo.
• Acompaña este delicioso postre con un poco más de cajeta por encima o con frutas frescas como fresas o frambuesas para un contraste delicioso.
• Si lo deseas, puedes hacer esta receta en porciones individuales utilizando moldes pequeños, lo que facilita el servicio y da una presentación más elegante.

Este flan de cajeta no solo es un postre tradicional y delicioso, sino que también es fácil de preparar y perfecto para cualquier ocasión. La mezcla de texturas y sabores hará que se convierta en un favorito de todos los que lo prueben. ¡Prepáralo y disfruta de un clásico con un toque especial!