El Pastel Más Suave del Mundo: Receta de la Abuela que Se Hacía Muchas Veces
Hay algo mágico en las recetas de la abuela, esas que se han pasado de generación en generación, llenas de amor y tradición. Hoy quiero compartir con ustedes una de esas joyas: el pastel más suave del mundo. Este pastel es tan delicado y esponjoso que cada bocado se derrite en la boca, transportándonos a esos momentos cálidos en la cocina de la abuela, donde el aroma dulce y acogedor nos envolvía. Esta receta es perfecta para cualquier ocasión, ya sea una celebración especial o simplemente para disfrutar de un dulce capricho casero.
Ingredientes
Para este delicioso pastel, necesitaremos los siguientes ingredientes:
- 4 huevos
- 200 g de azúcar
- 200 g de harina
- 200 ml de leche
- 100 ml de aceite de girasol
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 1 sobre de levadura en polvo
- Una pizca de sal
Instrucciones
Preparación del Pastel
- Precalentar el horno: Precalienta tu horno a 180°C (350°F) para que esté a la temperatura adecuada cuando tu mezcla esté lista.
- Batir los huevos y el azúcar: En un bol grande, bate los huevos junto con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y de color claro. Este paso es crucial para lograr la textura suave del pastel.
- Añadir líquidos: Añade la leche, el aceite de girasol y la esencia de vainilla a la mezcla de huevos y azúcar. Mezcla bien hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
- Tamizar ingredientes secos: En otro bol, tamiza la harina, la levadura en polvo y la pizca de sal. Este paso ayuda a evitar grumos en la masa y asegura una distribución uniforme de los ingredientes.
- Incorporar los ingredientes secos: Gradualmente, añade los ingredientes secos tamizados a la mezcla líquida, batiendo suavemente con una espátula o batidor de mano hasta que no queden grumos. No mezcles en exceso para evitar que el pastel pierda su esponjosidad.
- Verter en el molde: Engrasa y enharina un molde para pastel de aproximadamente 24 cm de diámetro. Vierte la masa en el molde, alisando la superficie con una espátula.
- Hornear: Coloca el molde en el horno precalentado y hornea durante unos 35-40 minutos o hasta que, al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
- Dejar enfriar: Una vez horneado, retira el pastel del horno y déjalo enfriar en el molde durante unos 10 minutos. Luego, desmolda con cuidado y deja enfriar completamente sobre una rejilla.
Decoración y Presentación
Este pastel es tan delicioso que no necesita mucha decoración. Sin embargo, puedes espolvorear un poco de azúcar glas por encima o acompañarlo con una bola de helado de vainilla para un toque extra especial. También puedes añadir frutas frescas como fresas o frambuesas para darle un contraste fresco y colorido.
Consejos de la Abuela
- Huevos a temperatura ambiente: Para obtener mejores resultados, asegúrate de que los huevos estén a temperatura ambiente antes de comenzar a batirlos. Esto ayuda a incorporar más aire en la mezcla, haciendo que el pastel sea aún más esponjoso.
- No abrir el horno: Evita abrir la puerta del horno durante el horneado, especialmente en los primeros 20 minutos. Esto puede hacer que el pastel se hunda y pierda su textura ligera.
- Prueba de palillo: La prueba del palillo es infalible. Inserta un palillo en el centro del pastel; si sale limpio, tu pastel está listo.
Con esta receta, estarás recreando un pedacito de la historia familiar, trayendo a tu hogar la misma dulzura y ternura que las abuelas solían compartir en cada rebanada. ¡Disfruta del pastel más suave del mundo y crea recuerdos inolvidables con cada bocado.
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