Solo harina, azúcar y 3 huevos ¡Unos dulces irresistibles!

A veces, las recetas más sencillas son las que más nos sorprenden . Con solo tres ingredientes básicos que seguro tienes en casa, puedes preparar unos dulces deliciosos, ligeros y esponjosos . No necesitas mantequilla, leche ni levadura, ¡y aun así, el resultado es espectacular!

Esta receta es perfecta si quieres hacer algo rápido y delicioso sin complicarte demasiado en la cocina . Además, su textura suave y su dulzura equilibrada harán que nadie pueda resistirse a probarlos . Te enseñaré el paso a paso para que queden perfectos, con una textura aireada y ese dorado irresistible que los hace aún más apetecibles.

Si te encantan las recetas minimalistas y efectivas, ¡esta será tu favorita! Ahora sí, pongamos manos a la obra y descubramos cómo hacer estos dulces con solo harina, azúcar y huevos.

Ingredientes

• 3 huevos

• 280 g de harina (tipo “00”)

• 250 g de azúcar + 1 cucharada extra

Preparación

Preparación de la masa

En un bol grande, bate los huevos con los 250 g de azúcar. Es importante hacerlo durante 10-15 minutos, hasta que la mezcla esté espumosa, clara y haya triplicado su volumen. Este paso es clave para lograr una textura ligera y aireada. Usa una batidora eléctrica para facilitar el proceso .

Una vez que la mezcla esté bien batida, añade la harina gradualmente . Incorpórala con movimientos suaves y envolventes de arriba hacia abajo, utilizando una espátula o varillas manuales. Así evitarás que la mezcla pierda su aire y los dulces queden esponjosos.

Formación de los dulces

Con la masa obtenida, forma aproximadamente 12 rosquillas o bolitas .

Agrega 1 cucharada de azúcar extra a la masa. Esto no solo potencia el sabor, sino que también le dará un brillo natural y hará que la masa sea más fácil de manejar .

Da forma a los dulces según tu preferencia, aunque para esta receta se recomienda un diseño alargado, similar a unas galletas o bizcochitos.

Cocción

Precalienta el horno a 190°C . Este paso es esencial para que los dulces suban bien y se doren de manera uniforme.

Coloca las piezas en una bandeja forrada con papel de horno . Asegúrate de que estén bien separadas para que el calor circule y se cocinen uniformemente.

Hornea durante 12-14 minutos, o hasta que los dulces estén dorados y cocidos por dentro. El truco para saber si están listos es presionar suavemente la superficie: si vuelve a su forma original, ¡están perfectos!

Retíralos del horno y déjalos enfriar en una rejilla durante unos minutos .

¡A disfrutar!

Tus dulces están listos para ser disfrutados con un café , un chocolate caliente o simplemente como un snack dulce en cualquier momento del día.

Esta receta es increíblemente fácil, pero el resultado es sorprendente: dulces ligeros, esponjosos y con un toque crujiente por fuera . Si quieres darles un extra de sabor, puedes espolvorearlos con un poco de azúcar glass o canela después de hornearlos.

¡Gracias por tu apoyo! Si te gustó la receta, califícala de 1 a 10 y cuéntame en los comentarios cómo te quedó. ¡Buen provecho!