Postre de 3 ingredientes fácil: el dulce que todos pueden hacer
|¿Alguna vez has tenido antojo de algo dulce, pero no querías pasar horas en la cocina? ¡Este postre es la solución perfecta! Con solo tres ingredientes que probablemente ya tienes en casa, puedes preparar un delicioso y cremoso postre que te dejará con ganas de más. Es ideal para esas tardes en las que quieres consentirte o sorprender a tus invitados con algo sencillo, pero lleno de sabor. Además, no necesitas ser un experto en repostería, cualquiera puede hacerlo, incluso en compañía de los más pequeños.
Ingredientes:
- 400 g de leche condensada
- 200 ml de crema de leche (nata para montar)
- 1 paquete de gelatina sin sabor (12 g)
Preparación:
- Preparar la gelatina: Comienza disolviendo la gelatina sin sabor en un poco de agua fría, siguiendo las instrucciones del paquete. Deja reposar durante unos minutos para que se hidrate bien y luego caliéntala ligeramente en el microondas o a baño maría hasta que esté completamente líquida y sin grumos.
- Mezclar la crema base: En un bol grande, agrega la leche condensada y la crema de leche. Bate suavemente hasta que los ingredientes se integren bien. Esta mezcla es la base cremosa de tu postre, aportando la dulzura y suavidad perfectas.
- Incorporar la gelatina: Una vez que la gelatina esté completamente disuelta y líquida, agrégala lentamente a la mezcla de leche condensada y crema de leche. Asegúrate de batir continuamente mientras agregas la gelatina para evitar que se formen grumos.
- Refrigerar: Vierte la mezcla en un molde o en vasos individuales si prefieres porciones personales. Lleva al refrigerador por al menos 4 horas o hasta que el postre esté completamente firme.
- Servir y disfrutar: ¡Y listo! Después de que el postre esté firme, solo queda servir y disfrutar. Puedes decorarlo con frutas frescas, chispas de chocolate o un toque de coco rallado, según tu preferencia.
Este postre de tres ingredientes es tan fácil de hacer que se convertirá en uno de tus favoritos para ocasiones especiales o para esos momentos en los que simplemente quieres darte un capricho. ¡No esperes más y pruébalo!