Rosquitas de Limón al Horno: La Receta Casera de la Abuela que Robará Corazones

¿Hay algo más reconfortante que el aroma de unas rosquitas de limón recién horneadas que llenan la casa con su fragancia cítrica y dulce?

Para muchos de nosotros, estas rosquitas evocan recuerdos de la infancia, de tardes pasadas en la cocina con la abuela, quien con sus manos expertas y su corazón lleno de amor, preparaba estas delicias. Las rosquitas de limón al horno son una tradición que ha pasado de generación en generación, y cada familia tiene su propia versión secreta. Hoy, te traigo una receta que es tan fácil como deliciosa, ideal para revivir esos momentos de nostalgia y crear nuevos recuerdos con tus seres queridos.

Ingredientes:

  • 500 gramos de harina de trigo
  • 150 gramos de azúcar
  • 2 huevos
  • 100 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
  • 1 limón (ralladura y jugo)
  • 1 cucharadita de polvo de hornear
  • 1 pizca de sal
  • Azúcar adicional para espolvorear

Instrucciones:

  1. Precalienta el horno: Comienza precalentando tu horno a 180°C (350°F). Mientras tanto, prepara una bandeja para hornear con papel pergamino o una ligera capa de mantequilla para evitar que las rosquitas se peguen.
  2. Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, tamiza la harina junto con el polvo de hornear y la pizca de sal. Este paso es esencial para asegurar que nuestras rosquitas queden esponjosas y bien aireadas.
  3. Prepara la masa: En otro bol, bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa y pálida. Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Incorpora la ralladura y el jugo de limón, lo cual dará a nuestras rosquitas ese toque cítrico tan característico.
  4. Combina los ingredientes: Gradualmente, incorpora los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla, azúcar y huevos. Remueve con una espátula o cuchara de madera hasta que todos los ingredientes estén bien integrados y tengas una masa homogénea.
  5. Forma las rosquitas: Con las manos ligeramente enharinadas, toma pequeñas porciones de masa y forma bolitas. Luego, haz un agujero en el centro de cada bolita para darle la forma tradicional de rosquita. Colócalas en la bandeja para hornear, dejando un poco de espacio entre cada una.
  6. Hornea las rosquitas: Lleva las rosquitas al horno precalentado y hornea durante 15-20 minutos, o hasta que estén ligeramente doradas en los bordes. Recuerda que el tiempo puede variar según tu horno, así que vigílalas de cerca.
  7. Deja enfriar y espolvorea: Una vez que estén listas, saca las rosquitas del horno y déjalas enfriar sobre una rejilla. Mientras aún están tibias, espolvorea un poco de azúcar por encima para darles ese toque final dulce y crujiente.

¡A Disfrutar!

Ahora que tienes tus rosquitas de limón al horno listas, solo queda disfrutar de su sabor y aroma. Perfectas para acompañar una taza de té o café, estas rosquitas son un auténtico viaje al pasado, donde la simplicidad y el amor en la cocina eran la clave de todo. Así que, ponte tu delantal, enciende el horno y prepárate para deleitar a tu familia con esta receta clásica que nunca pasa de moda. ¡Buen provecho!